Poca cosa, en verdad, lo que sabemos respecto a la Obra Soñada. Esta descripción tan hueca, tan sin contenido, me causa la impresión de ciertas mitologías americanas penosamente reconstruidas por los misioneros, con fundamento en unas cuantas vagas noticias mal averiguadas y sorprendidas de casualidad, arrebatadas a pedazos a quienes de propósito querían ocultarlas, como empeñados en que con ellos murieran también su religión, su filosofía, su moral.