es
Rick Riordan

La maldición del Titán

Avise-me quando o livro for adicionado
Para ler este livro carregue o arquivo EPUB ou FB2 no Bookmate. Como carrego um livro?
Ante la llamada de socorro de su amigo el sátiro Grover, Percy acude inmediatamente en su auxilio. Y aunque va acompañado de Annabeth y Thalia, las dos semidiosas que son sus aliadas, ninguno imagina la sorpresa que los aguarda: una terrible mantícora pretende secuestrarlos y llevarlos ante el general enviado por Cronos, el diabólico señor de los titanes. Sin embargo, gracias a la ayuda de las cazadoras de Artemisa, Percy y sus aliadas logran escapar y volver al campamento mestizo. Una vez allí, emprenderán la búsqueda del monstruo que puede provocar la destrucción del Olimpo, a pesar de que, según la profecía del Oráculo, sólo uno de ellos logrará resistir la maldición del titán.
Este livro está indisponível
279 páginas impressas
Já leu? O que achou?
👍👎

Impressões

  • valenvaluboocompartilhou uma impressãoano passado
    👍Vale a leitura
    🚀Não dá pra largar
    💧Sentimental

Citações

  • valenvaluboofez uma citaçãoano passado
    —No puedo permitir que Nico corra más peligros —dije—. Eso al menos se lo debo a su hermana. Les he fallado… a los dos. No permitiré que ese pobre chico sufra más
  • valenvaluboofez uma citaçãoano passado
    —¡Me lo prometiste! —Me lanzó una mirada furibunda con los ojos enrojecidos y empuñó con fuerza la figura del dios—. No debería haber confiado en ti. —La voz se le quebró—. Me mentiste. ¡Mis pesadillas eran ciertas!

    —¿Qué pesadillas?

    Arrojó la pequeña figura, que rodó tintineando por el mármol helado.

    —¡Te odio!

    —Tal vez esté viva —dije a la desesperada—. No estoy seguro…

    —¡Está muerta! —Cerró los ojos. Todo el cuerpo le temblaba de rabia—. Debería haberlo adivinado. Está en los campos de Asfódelos ahora mismo, de pie ante los jueces. Puedo sentirlo.
  • valenvaluboofez uma citaçãoano passado
    —Ella quería que conservaras esto —le dije, y saqué la figura que Bianca había encontrado en la chatarrería. Nico la sostuvo en la palma de la mano y la contempló

Nas estantes

fb2epub
Arraste e solte seus arquivos (não mais do que 5 por vez)