Camelia: talentosa pianista, bella y frágil como la flor que lleva su nombre. Andreas: fascinante fotógrafo, lleno de luces y sombras. Dos fragmentos del mismo cristal. Frágil, Brillante, Cambiante, Agrietado, Invertido, Claro, Centelleante, De piedra, Transparente, Ligero, Reluciente, Destellante, Afilado… Adecuado para quienes prefieren historias de la era del postromanticismo y para los amantes del suspense, “Yo, frágil como el cristal” es el primer capítulo de una serie actualmente en desarrollo.
Camelia es una joven frágil, como la flor de la que lleva su nombre. Después de la pérdida de su padre, el mundo se vuelve más duro e incierto. Si no fuera por su gato Mozart, por Terry, su amiga de la librería, y por Andrés, su vecino de alma inquieta, estaría completamente sola.
Con Andrés nace un vínculo complejo, hecho de atracción y miedo; tal vez Camelia ha sufrido demasiado para reconocer y aceptar el amor. Lo único que la mantiene a flote es la música: tocar el piano es su forma de expresión más auténtica. Una velada especial, recibida con un estruendoso aplauso, le da una nueva esperanza.
Sin embargo, el pasado pesa como una sombra en su vida diaria, lo que le dificulta abrirse y amar verdaderamente.
“Yo, como el cristal” relata con una mirada lúcida y delicada el difícil paso hacia la edad adulta temprana, entre heridas que piden ser curadas y sueños que buscan espacio para florecer. Una novela que explora con profundidad la psicología de sus personajes.
PUBLISHER: TEKTIME