Real (Saga Real 1)

Estoy tan jodidamente enamorado de ti que ya no sé qué hacer conmigo mismo.

«Cuando le miro, olvido quién soy y le deseo como nunca he deseado a ningún otro hombre.»

Lo único que tengo en mi mente esta noche es el demonio de ojos azules que puso sus labios sobre los míos.

Me extiende en la colchoneta y separa mis piernas y brazos, y ahora mira su miembro.

—¿Y si llega alguien? —protesto con desgana.

—Aquí nadie va a llegar.

—Por supuesto que sí.

De puntillas, uso sus hombros para impulsarme hacia arriba y aplastar su boca contra la mía. Él succiona mi lengua y me baja las braguitas por las piernas y me tumba en las colchonetas, nuestras pieles desnudas deslizándose suavemente la una contra la otra.

Y su polla, delante de mí.

Me acabo de morir.

—¿Te gusta lo que te hago… con esto… ? —Cuando se quita los pantalones, casi me desmayo con la visión de diez culos de Remington reflejados en los espejos, de sus potentes piernas por detrás, su estrecha cintura y sus anchos hombros.

Descubre mis pechos. Si miro a cualquier sitio que no sea él, sé que podré verme a mí misma desnuda en los grandes espejos de las paredes de nuestro alrededor. Este hombre es todo virilidad, y no sé lo que me provocará una visión tan amplia de él desde todos los ángulos. ¿Mi sexy y musculoso Remington, gloriosamente desnudo, y multiplicado por diez? Dios mío.

—¿Te gusta lo que te hago con los dedos? —Su voz es suave y baja, y estoy completamente erotizada por sus preguntas.

—Sí, Remy.