Abriré los caracoles donde viven las princesas de los mares
Yolanda Segurafez uma citaçãohá 14 dias
besar a una muchacha.” El hombre era yaqui, no hablaba español, murió por un beso que el oficial galantemente le adjudicó.
Yolanda Segurafez uma citaçãohá 14 dias
A mí me parecía maravilloso ver tanto soldado. Hombres a caballo con muchas cartucheras, rifles, ametralladoras; todos buscando la misma cosa: comida.
Yolanda Segurafez uma citaçãohá 14 dias
otro día, a la salida de las fuerzas de Murguía, al pasar por el panteón, de x regimiento sacaron a X soldado, el que nunca había visto a Luisa mi prima; ellos dijeron a la tropa: “Este hombre muere por haber querido be
Yolanda Segurafez uma citaçãohá 14 dias
Nacha Ceniceros vivía. Había vuelto a su casa de Catarinas, seguramente desengañada de la actitud de los pocos que pretendieron repartirse los triunfos de la mayoría.
Yolanda Segurafez uma citaçãohá 14 dias
Se hizo mi amigo porque un día nuestras sonrisas fueron iguales.
Yolanda Segurafez uma citaçãohá 14 dias
mataron rápido, así como son las cosas desagradables que no deben saberse.
Yolanda Segurafez uma citaçãohá 14 dias
—Fusílenlo. —Fue una mujer, General. —Fusílenla. —Nacha Ceniceros. —Fusílenla. Lloró al amado
Yolanda Segurafez uma citaçãohá 14 dias
Ella era coronela y usaba pistola y tenía trenzas. Había estado llorando al recibir consejos de una vieja.
Yolanda Segurafez uma citaçãohá 14 dias
Nacha Ceniceros domaba potros y montaba a caballo mejor que muchos hombres; era lo que se dice una muchacha del campo, pero al estilo de la sierra; podía realizar con destreza increíble todo lo que un hombre puede hacer con su fuerza varonil. Se fue a la revolución porque los esbirros de don Porfirio Díaz le habían asesinado a su padre