«"Homo argentinus": especie moderna que ejerce la creatividad, la volatilidad y la resiliencia de manera periódica para atravesar su día con enorme sonrisa. El atroz encanto de ser argentino, diría Marcos Aguinis. Un oxímoron para graficar la hermosa contradicción de nuestro adn. […] ¿Un país que es mejor extrañar que vivir? No comparto. Espero que ustedes tampoco». Los argentinos somos el resultado de nuestras anécdotas, de la cotidianidad que nos vincula; la historia de cada uno de nosotros es la del resto y la del resto es también la nuestra.
Lo que prevalece en Cortito el cuento es la pregunta acerca de quiénes somos en relación con los demás, como así también reflexiones sobre la construcción de nuestros ídolos populares, la experiencia inmigratoria, las Malvinas o, sencillamente, la sensación de que demasiadas cosas nos ocurren. Entre el ensayo y la ficción, con un estilo narrativo despojado pero contundente, Belisario Fernández Funes reconstruye escenas mínimas, cotidianas, que interpelan al lector en la búsqueda de aquello que llamamos «argentinidad».