Rendición (Premio Alfaguara de novela 2017) (Spanish Edition)

porque la mujer de uno huele como ninguna otra cosa y cada persona está acostumbrada a olerse a sí misma y a la persona a la que quiere, tanto que hasta que no te quedas sin olor no sabes lo extraño que te sientes cuando te lo arrebatan.

amor alimenta y calma aun en las peores condiciones, o precisamente y con más razón en las peores condiciones

. Mirar a una mujer en nada se parece a abrazarla, porque en el abrazo están dos muy juntos y se tapa todo y en la distancia, al excluirse uno, parece de pronto la mujer a quien uno quiere como las cosas que se admiran de lejos.

Ella, como todas las mujeres, es más fuerte que los hombres, pero a veces se rompe y la abrazo.

La vida no amenaza a la vida, la estimula.

La gente que sabe contar historias siempre tiene compañía.

Un hombre que no provee a los suyos se va haciendo pequeño hasta que no existe

algo he aprendido viendo morir nuestro jardín es que ni lo bueno ni lo malo se detiene a revisar nuestros cálculos, ni aprecia nuestros esfuerzos, simplemente sucede.

Ya no sé a ciencia cierta si este que soy ahora, constantemente emponzoñado contra la felicidad que me rodea, es fruto del traslado, o si siempre fui lo mismo

¿Qué maldad se esconde en el alma de quien no se reconoce como uno más entre sus semejantes?