Pero no hay nada eterno en el mundo. Por eso, la alegría del primer instante no es ya tan viva a los dos minutos, al tercero se debilita más aún y al fin se diluye inadvertidamente con el estado de ánimo habitual
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Aunque, sin embargo, con todo y con ello, si bien, naturalmente, se puede admitir esto y lo otro y lo de más allá, es posible incluso… Porque, claro ¿dónde no suceden cosas absurdas? Y es que, no obstante, si nos paramos a pensar, seguro que hay algo en todo esto.
ASIES VIZCARRA RUSO
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Pero lo más chocante, lo más incomprensible de todo es que los autores sean capaces de elegir semejantes temas.
Plantear temas "absurdos" para dejar en evidencia la sociedad rusa de esa época y sus sinsentidos. Un grande Nicolai, más grande que la nariz de un nargentino. 👁👄👁
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Y con la hija no me caso, desde luego. Así por las buenas, par amour, ¡ni pensarlo!
A wiwi, non paj amuj si puj lajyón
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«¿Cómo se puede soliviantar a la gente con bulos tan estúpidos e inverosímiles?»
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Pero no hay nada eterno en el mundo. Por eso, la alegría del primer instante no es ya tan viva a los dos minutos, al tercero se debilita más aún y al fin se diluye inadvertidamente con el estado de ánimo habitual
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Pero, ¿qué diablos es un hombre sin nariz? No es un pajarraco ni es un ciudadano honrado.
No es un ñuan ñiñel
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Pero, ¿qué diablos es un hombre sin nariz?
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Preciso es señalar que Kovaliov era un hombre sumamente susceptible. Podía perdonar cuanto dijeran de su persona, pero de ningún modo lo que se refiriese a su categoría o a su título.
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«Esto sí que es bueno -solía decir-. No hay nada mejor. No piden de comer, ocupan tan poco sitio que siempre caben en el bolsillo y si se caen, no se rompen.»