Tres relaciones que las siento tan cercanas
debimos ser felices de Rafaela Lahore, se lee como un poema extendido. Para mí, fue inevitable hacer paralelos con el bellísimo libro de Ocean Vuong, On earth we are briefly gorgeous.
Lahore escribe sin presuntuosidad, con delicadeza y profundidad; escribe tremendamente hermoso. Esta novela fragmentada se construye alrededor de las relaciones madre-hija, amores y cuidados inter-generacionales. Hay hilos de temas que permean, y colorean la historia, pero el centro es ese vínculo vital de una madre cuyo sufrimiento desborda los mandatos de la maternidad.
Lahore examina las heridas, y no las expone para sanarlas, lo cual me parece también hermoso y sobre todo, un acto de resistencia, frente a un mundo que no nos acepta rotos.
Además, esta novela, para mí fue sinestésica; escuche paisajes e imaginé el olor de los colores, todo eso, en mi propia lectura de su narración, no porque la autora haya hecho uso de esa figura retórica.
Bellísima lectura !la recomiendo mucho!
Lidiar con la depresión no es solo para quien la vive en carne propia, sino que es una batalla indirecta y a ciegas para quienes están cerca de la persona y este libro lo demuestra. Puede tener muchas caras, matices, signos, pero al final es avasallante para los que la enfrentan.