Apolodoro de Atenas es para nosotros un perfecto desconocido, pero le debemos este tratado de mitografía, probablemente compuesto en el siglo I o II d. C., que constituye una útil y esclarecedora catalogación de una gran cantidad de material legendario. En la elaboración del compendio el autor muestra su exhaustivo conocimiento de la tradición literaria que trasmitió el repertorio mítico. No tiene pretensiones estilísticas, pruritos filosóficos ni afectaciones poéticas, sino que con buena y transparente prosa se aplica a narrar las vicisitudes de dioses y héroes, con sus genealogías; los nombres se suceden y entrelazan en un entramado de mitos que transmite una visión arcaica del mundo divino y humano. Se trata de una rigurosa obra de erudición sobre un material que, por su lejanía en el tiempo, ha dejado de formar parte de las creencias y la religión, para integrarse en el bagaje cultural y en una herencia ya literaria. Escrita con notable precisión didáctica, la «Biblioteca» es un excelente manual de mitología.