Extensión del cuerpo

No quiero
escribir un poema
ni adornar las palabras;
sólo dejar asentado
que sí te extraño
que las cosas pasan
pero algunas
se quedaron
conmigo.

De repente
todos los derrumbes
llevan tu nombre.

No quiero
escribir un poema
ni adornar las palabras;
sólo dejar asentado
que sí te extraño
que las cosas pasan
pero algunas
se quedaron
conmigo.
Es que todo
lo que dejaste
de este lado
son ruinas
que todavía
sigo levantando.

los días pasan
con la misma furia
que el mar en invierno

convertía el bosque
en un incendio
inapagable.
Antes de que te vayas
querría confiar
en la fuga de las cosas
dejar de tener miedo
descubrir las zonas
de valentía
y entender
que el amor
puede ser
solo un rato

Antes de que te vayas
querría escribir
el poema más lindo
y que te incluya.
Hablaría de la noche
que bailamos
y confiamos
en que el amor
podía construirse
sólo con un beso.
De cómo mordí
tu cuello
como la fruta
más húmeda
y del momento exacto
en que te acercaste
a mi boca
me pasaste una pastilla
y me dijiste
“tomá, te regalo
todos mis universos”
mientras el calor
de mi mano
en tu pelvis

Hoy aprendí algo:
el engaño también
se construye de a dos

no saber nada
cuando con la salida del sol
todo esto termine

Después del fuego
sólo queda la tristeza

el refugio
del miedo
que ataca
por la noche.
Tus brazos:
el río que
me recibe
cuando no
encuentro
a dónde ir