Idea Vilariño

  • Berenice Torresfez uma citaçãohá 2 meses
    No sos mío
    no estás
    en mi vida
    a mi lado
    no comés en mi mesa
    ni reís ni cantás
    ni vivís para mí.
    Somos ajenos

    y yo misma
    y mi casa.
    Sos un extraño
    un huésped
    que no busca no quiere
    más que una cama
    a veces.
    Qué puedo hacer
    cedértela.
    Pero yo vivo sola.
  • Zaydifez uma citaçãohá 2 meses
    Susurramos

    decimos

    murmuramos

    tibio blablá al oído

    a los labios la piel el pelo

    a

    acariciandonós

    con voces

    con sílabas

    con emes

    con sonidos.
  • Laura Contrerasfez uma citaçãohá 9 meses
    ESTOY TAN TRISTE
  • Mayra Ramosfez uma citaçãohá 2 anos
    Pero en algún momento
    me volverá a este cuarto
    me tiraré en la cama
    y entonces tu recuerdo
    qué digo
    mi deseo de verte
    que me mires
    tu presencia de hombre que me falta en la vida
    se pondrán
    como ahora te pones en la tarde
    que ya es la noche
    a ser
    la sola única cosa
    que me importa en el mundo.
  • Mayra Ramosfez uma citaçãohá 2 anos
    TANGO
    Yo vengo por la calle
    compro pan
    entro en casa
    hay niebla y vengo triste
    tu amor es una ausencia
    tu amor digo mi amor
    amor que quedó en nada.
    Subo las escaleras
    repasando esa historia
    y me quedo en lo oscuro
    tras de la puerta
    amarga
    pensando no pensando
    en tu amor
    en la vida
    en la soledad que es
    única certidumbre.
    (1957)
  • Mayra Ramosfez uma citaçãoano passado
    Morirse
    no morirse
    y estarse triste repartiendo adioses
    moviendo
    adiós
    apenas
    el pobre corazón como un pañuelo.
    (2001)
  • Sofi An Cruzfez uma citaçãoano passado
    No sé qué hay en la tarde, en la luz, en el alma,
    no sé si fue esa música dolorosa y fantástica
    o si es este silencio perfumado y oscuro
    o esta luz de crepúsculo perfumada y callada.
    Me faltan tantas cosas que me duelen las manos
    que se alargan dolientes, pálidas y vacías.
    Da hasta miedo seguir
    si con tan pocos años pesa tanto la vida.
    Nunca tan cerca de la vida. Nunca.
    Nunca tan grande como hoy la muerte,
    sobre todo, ante todo, al fin de todo,
    y yo, sintiéndome ir trágicamente.
    La tarde que se muere se agiganta.
    Yo me siento perdida.
    Da hasta miedo seguir
    si con tan pocos años pesa tanto la vida.
  • Sofi An Cruzfez uma citaçãoano passado
    Ahora soy una mano,
    una mano tendida,
    una mano vacía,
    abierta, azul y helada.
    Para qué las violetas
    y para qué la vida.
    Para nada.
    Ahora soy unos ojos,
    unos ojos sin llamas
    que se alargan vacíos
    en la luz desolada.
    Para qué los jazmines
    y para qué la vida.
    Para nada.
    ¿Y las claras estrellas
    y las hojas caídas
    y los libros azules
    y las cuerdas del arpa
    y los brazos en alto
    y las manos transidas
    y los gritos del cuerpo
    y los gritos del alma?
    Ah, no sé, ya no sé.
    He quemado mi frente,
    he quemado
    los candores más íntimos,
    la más alta esperanza,
    he quemado mis panes
    y he quemado mis trigos,
    he quemado mi tierra
    y he quemado mi agua.
    Y ahora qué.
    Ah, los ojos,
    estos ojos sin nada.
  • Sofi An Cruzfez uma citaçãoano passado
    Hoy tengo el corazón frío y azul,
    los ojos de neblina
    y las manos heladas.
    Ah, madre,
    qué cansada estoy,
    qué cansada.
    Si ya no puedo más con este fardo
    este fardo sombrío
    que me he echado a la espalda.
    Y estos que van conmigo
    y que me escuchan
    se miran y preguntan
    ¿De qué fardo nos habla?
    Ah, madre,
    no sabes cómo estoy
    de cansada.
  • Sofi An Cruzfez uma citaçãoano passado
    Una lluvia pausada, alargada, serena,
    envolvente, inquietante, sostenida, perfecta.
    He dejado la música, ahogué todas las voces
    para escuchar la suya que suena tenazmente
    como un hilo de plata dentro de un viejo odre.
    Y me digo, rendida, sin voz, pausadamente,
    que la lluvia cayendo hace un ruido de gente
    cayendo sobre el mundo a lo ancho de los siglos
    acompasadamente.
    Dentro de mí no hay ruidos.
    Hay cántaros vacíos, campanarios en ruinas,
    hogueras apagadas, hay agotadas minas
    blancos ojos de estatua, grandes estrellas huecas,
    relojes sin agujas y libros sin palabras
    y violines sin cuerdas.
    Y un silencio espantoso en que cae la música
    armoniosa, cansada, perfecta, de la lluvia
    con un ruido de perlas contra el fondo de un cofre,
    con un ruido de alas, de dedos; con un ruido
    monótono, angustioso, ancestral, monocorde.
    (28 de octubre de 1941)
fb2epub
Arraste e solte seus arquivos (não mais do que 5 por vez)