Finalmente, la abu dijo: Penda, hablar dos idiomas o incluso más es una riqueza, tener djinns no te convierte en una persona enferma, es sano, la unidad del sujeto es una construcción que te fragmenta, y añadió que no debía sentirme obligada a optar por una cosa u otra. Quién mejor que ella para saberlo, una senegalesa que, tras convertirse en paria dentro de su familia, había echado nuevas raíces en Gabón mientras criaba a sus nietas en Francia.
Yo esperaba esas palabras de la abu desde hacía un montón. Antes de colgar dijo, no hay que forzarse a elegir, hay que ir hacia uno mismo, seguir siendo pirata.