Alban Ball

ISFP - El aventurero: Artistas serios, sensibles y amables, los ISFP no juzgan y son tolerantes con la gente. No les gustan los conflictos, por lo que no suelen hacer nada que pueda resultar conflictivo. Son originales y creativos, y buscan la belleza estética. En lugar de ser un líder, los ISFP prefieren desempeñar un papel de apoyo.

ESFJ - El Cónsul: Cordiales, sociables y organizados, a los ESFJ les encanta estar rodeados de gente y siempre están interesados en servir a los demás. Valoran las tradiciones y la seguridad, y tienen ideas bien definidas de cómo deben ser las cosas, por lo que a veces pueden ser juiciosos.

ENFJ - El protagonista: Líderes carismáticos e inspiradores, con un excelente don para tratar y relacionarse con las personas. Los ENFJ se centran en ayudar a las personas a aprender y crecer. Lo ven todo desde el punto de vista humano y eso les convierte en mentores naturales. A veces, incluso pueden anteponer las necesidades de los demás a las suyas propias.

NFP - El activista: Espíritus creativos y entusiastas, quienes piensan que encontrar la felicidad es su misión. Tienen un gran don para tratar y relacionarse con las personas y acogen las relaciones con profundidad e intensidad emocional. Los ENFP suelen tener una amplia gama de intereses y habilidades, y pueden entusiasmarse con nuevas ideas.

ESFP - El animador: Espontáneos, enérgicos y divertidos, los ESFP están orientados a la gente y son amantes de la diversión.
Les gusta ser el centro de atención en las situaciones sociales. Son muy entusiastas de la vida y hacen que las cosas sean más divertidas para los demás con su disfrute.

Recuerda que nadie es tu jefe y que tú eres el que manda.

“No sé lo que quiero”. Nueva creencia: Soy el producto de mi entorno; yo escojo tomar las oportunidades para hacer mi propia realidad. Cuando aceptas el cambio, es menos probable que la preocupación controle tu mente. No tengo que saber mi destino, sólo la dirección que quiero tomar. Empieza por lo pequeño y construye una escalera sobre cómo llegar a donde necesitas estar. Trabaja en aprender a disciplinarte, en habilidades de comunicación, en tácticas de negociación, en técnicas de persuasión, en estar saludable a través del ejercicio, y aprende a ser flexible con tus horarios. Estas cosas son habilidades universales que se necesitan para encontrar la pasión.

4 cosas que debes saber para encontrar tu pasión

1. La pasión es lo que te gusta hacer: La pasión es una fuerte emoción o deseo por alguien o algo. Es lo que te gusta hacer, tal vez te pierdes en ello y el tiempo cesa, te atrae instintivamente, te produce una gran satisfacción y/o es algo a lo que puedes dar un SÍ rotundo si te dan el tiempo y la oportunidad.

2. La pasión es energía: La pasión alimenta el fuego de la inspiración y nos abre las oportunidades y la motivación para atender las necesidades que nos rodean. Hay un poder que proviene de hacer lo que te entusiasma. Cuando haces lo que está alineado con lo que eres, obtienes energía de ello. Te sientes motivado para salir de la cama y perseguirlo y te da algo que esperar.

3. La pasión tiene que ver con la búsqueda, la perseverancia y la progresión (¡Acción!):

Las personas apasionadas HACEN lo que les gusta, su energía por ello los lleva a la acción. Persiguen su pasión de forma constante y tienen un fuerte nivel de compromiso. La persiguen con determinación, a pesar del dolor y el fracaso o la decepción, y siguen adelante.

perseguir una oportunidad. Perseguir tu pasión puede llevarte a tu objetivo y el resultado puede ser un mayor impacto en el mundo y la realización de ti mismo.

Ahora, respira hondo, porque estás a punto de descubrir tu pasión y tu propósito. Cuando te sientas preparado, pasa a la siguiente página y comencemos este viaje de autodescubrimiento