¡Finalmente pude terminar de escribir de la historia que quiero contarles en este libro!
He cerrado exitosamente un ciclo que me exigió al máximo, he vivido una experiencia que, aunque fue aterradora y representó el desafío más grande de mi vida… hoy mirándolo en perspectiva, tengo que afirmar que no fue negativa; por el contrario, fue una experiencia enriquecedora que me hizo CRECER y VALORAR de una manera que jamás habría pensado todo lo que nos parece normal y no entendemos que son milagros y grandes bendiciones.
Estoy escribiendo en un avión volando de regreso a Miami, la ciudad donde vivo; después de haber dado gracias in-situ a uno de los dos “seres” o “entidades” que me acompañaron en todo este proceso que relatare a continuación. Tenía que “pagar” o mejor dicho “honrar” la palabra empeñada, no sé cómo lo logre para ser honesto; pero soy fiel creyente de que cuando uno se fija una meta y decreta con convicción que lograra un objetivo poniéndole todo el corazón y las ganas en hacerlo realidad… definitivamente el universo o Dios según la fe de cada uno, no solo “conspira a su favor” … lo hacen realidad ¡por más loco o imposible que parezca!
Espero que mi historia encuentre similitudes positivas con la suya y pensando de la manera más humilde del mundo, sirva de inspiración o acompañamiento para todos aquellos lectores que pudieran estar pasando algún momento delicado.
No les adelantare más para que puedan viajar conmigo cronológicamente por cada paso o etapa de la historia y aprovecho para darles las gracias de ante mano por tomarse el tiempo de leer estas líneas, espero que sean de su agrado y más importante aún: ¡de muchísima utilidad!
